Los habitantes de un pueblo suelen ser el alma y motor para que las zonas rurales se mantengan en buen estado. Ellos trabajan la tierra para que produzca, crezca y genere frutos para todos, y, al mismo tiempo, estimula la expansión de las zonas.
El despoblamiento se ha convertido en una causa letal para el exterminio de esas zonas, combinados con los cambios climáticos son un dúo letal para el ambiente y las zonas verdes. Los pueblos se quedan sin sus habitantes y zonas, como también prados, sin las manos que los trabajan y hacen crecer. “El abandono de las actividades agraria y ganadera tradicionales provoca un aumento de la superficie forestal, que crece sin control, a merced de los incendios forestales”, esto lo comenta: Secundino Caso, presidente de la Red Española de Desarrollo Rural (REDR).
La crisis climática, caracterizada por un exponencial aumento de temperaturas, no hace más que empeorar el riesgo de incendio en las zonas rurales.
Incendios que no paran de expandirse
Estudios revelan que muchas aldeas lejanas ubicadas en zonas boscosas están en cierto peligro de extinción, al no contar con las suficientes herramientas necesarias para combatir un incendio si se presentase. Esto alarma gravemente la situación en las aldeas donde viven y ejercen actividades agrícolas campesinos.
Las zonas rurales son sinónimo de salud ambiental, si el despoblamiento de habitantes continúa sin lugar a duda, estos lugares están propensos a sufrir nefastos incendios. Organizaciones están presentes en la lucha, están en contra del despoblamiento ya que es dar paso a incidentes negativos que afectan a nuestro ambiente.
Los seremos humanos somos el pilar fundamental de nuestro planeta, unos hacen el bien, otros trabajan para el mal. Sin embargo en cierta medida la naturaleza nos necesita y debemos de apoyarla.
Crisis climática en aumento
Grandes cambios se están presentando a nivel global. Este año han repercutido ciertos acontecimientos que han provocado la preocupación de muchos y por lo tanto se están adoptando nuevas medidas para contrarrestar estos cambios climáticos.
Nuestros mares se quedan sin agua, nuestros ríos se agotan, los incendios parecen tomar lugar en muchas zonas rurales. Todo parece un escenario donde los cambios generados por la naturaleza nos alarman, indicándonos una señal de que hay que cambiar y prevenir.
¡Tomar acción! Las grandes naciones tienen la obligación de actuar en la brevedad, preocupa mucho que Estados Unidos, país potencia, no apoya estos cambios que sin lugar a duda los han afectado. Por ello es importante hacer un llamado a la unión en estos tiempos crecientes de crisis y expectativas.
¿El despoblamiento disminuye?
Así es, todo no abarca solo noticias negativas. En los últimos años se ha presentado una disminución del 30% en el despoblamiento. Eso quiere decir que los habitantes no tienen en mente dejar sus zonas así hayan percances climáticos. Seguirán apostando por la producción y desarrollo de las zonas verdes, es su hogar y es satisfactorio saber que esas pequeñas poblaciones son fundamentales para la ayuda contra los cambios que promete la madre naturaleza.
